Ya no quiero más preguntas rondando esta cabeza hueca, vacié todo su contenido sobre la almohada de mis pesadillas y ya sólo quedan puntos oscuros torturándome.
La irrealidad de mis sueños enloquecidos a bajado sus revoluciones y cada caricia me sana, arregla el cuerpo y mejora mis sabores...
Ilusiones cristalinas rondan nuevamente la órbita de mi ser, los ruidos poco a poco se silencian de manera caótica, el corazón se afloja de su sitio y vuelve a volar, con movimientos suaves y versos lastimados...
Tócame con la suavidad del amor, que tus manos sean como hojas cayendo lentamente, llena con tu luz los espacios en tinieblas... y cuida mis heridas, sana mis rasguños, tiéntame a la felicidad... arréglame las sonrisas...